Estructura única y un sinfín de retos

Varios agentes estamos inmersos en la promoción de las comunidades energéticas en diferentes rincones de Euskal Herria. Se impulsan estructuras locales, vecinales y comarcales para llevar a cabo acciones de generación y decrecimiento energético y actividades económicas. Las iniciativas que tienen como objetivo la soberanía y la restricción energética agrupan en una misma comunidad diferentes grupos de interés para la consecución del objetivo: personas usuarias (ciudadanía), personas jurídicas usuarias (agentes públicos y empresas), personas físicas, jurídicas y administraciones públicas que pueden ser socios colaboradores. Tienen carácter comunitario y ciudadano, por lo que su finalidad es el beneficio público.

Por tanto, el objetivo principal es organizarse en el seno de una comunidad y afrontar un reto de país. ¿Y si nos uniéramos no sólo para la energía sino para abordar juntos otros retos? Esta es la base de la idea de la Cooperativa Popular. Dar respuesta conjunta desde una única estructura a una serie de cuestiones que suponen retos de país.

A la hora de definir las cooperativas populares decimos:

«Ofrece un punto de encuentro entre los agentes socioeconómicos del municipio y la ciudadanía para satisfacer juntos los retos de interés general»

Y de la misma manera,

«Ofrece la posibilidad de encauzar, junto con el ayuntamiento o la administración pública, una nueva gobernanza en el municipio. Partiendo de la iniciativa popular, tiene el objetivo de obtener el beneficio público del pueblo y de su ciudadanía».

Los Estatutos de la Comunidad Cooperativa de Energía Ixotzen de Elgeta recogen en su objeto la actividad de garantía de la condición de cooperativa popular en los siguientes términos:

«Desarrollar una promoción activa, accesible para todas las personas, de los programas de emprendimiento social y cooperativo y de las cooperativas comunitarias para avanzar hacia un desarrollo local independiente que satisfaga las necesidades socioculturales y económicas de la ciudadanía».

Más allá de satisfacer las necesidades energéticas, la comunidad organizada de Ixotzen servirá en adelante para satisfacer otras necesidades económicas o sociales del municipio. En este caso han abordado el reto de la energía. En Bakaiku, por su parte, desde la cooperativa popular Bakaikuarrok, con dos años de trayectoria, se ha abordado de manera prioritaria la soberanía alimentaria.

El desarrollo de la idea de Cooperativas Populares se enmarca en el proyecto KoopFabrica de emprendimiento social cooperativo. Y recientemente se ha publicado una guía en la web de Olatukoop. Si quieres saber más pincha en los enlaces y lee las publicaciones y conoce las cooperativas populares que están en marcha en Euskal Herria.

Arianne Kareaga
Berener